miércoles, 5 de marzo de 2014

PASEANDO POR EL PARQUE DEL BUEN RETIRO, UN PLACER PARA LOS SENTIDOS

Todos buscan algo y allí lo encuentran; unos hacen carrera, otros bicicleta, yoga, fotografía y tantas otras cosas que con buen orden y concierto todos hacemos parque.
Sin dudarlo, es un gran parque donde poder encontrar un respiro a la gran ciudad y disfrutar de un pedazo de naturaleza.
Allí tenemos lugares tan pintorescos como un palacio de Cristal y una laguna de impresionantes dimensiones en la que poder echarle de comer a peces, patos y palomas y quedarnos con las ganas de subirnos a una de esas barcas a las que a bien seguro nos montaremos.












martes, 4 de marzo de 2014

HOY ES UN DÍA ESPECIAL... MAÑANA COMO DE COSTUMBRE

Cada uno es de una manera, diferente al resto, casi podriamos decir que único. Desde el más fuerte al menos preparado todos comparten el mismo sueño y luchan con las armas que a su alcance tienen.
Todos juntos pero cada uno a su paso, algunos en solitario, otros en compañia y alguno que yo me se, maldiciendo desde su nobleza al que suscribe.
La meta de hoy era llegar, como fuese, pero llegar, el placer estaba en el camino con mayor o menor sufrimiento y la recompensa final, como de costumbre, alrededor de la mesa.
El tiempo pasa y nosotros quedamos en nuestro recuerdo haciendo de un día algo especial, que la monotonía de lo que nos queda no mate nuestra alegría por vivir.
Dejamos imagenes de nuestro paso difíciles de olvidar de la memoria, cada una llena de significado.
Sigamos adelante y si es posible, con más fuerza que ayer.


















Tras el recorrido del otro día, ahora salimos del mismo lugar para hacer un entrenamiento casi exclusivamente a base de sendas. Saldremos desde el Peñon y salvo el tramo de enlace a la primera senda, el resto será una sucesión contínua en subida, bajada y enlaces en forma de sendas donde sin parar no nos daremos cuenta que el tiempo pasa junto a los kilómetros recorridos. 
Que decir tiene que los paisajes son muy buenos y nos ayudarán en todo momento en nuestro trote pues en alguna ocasión las piernas nos dirán de parar, pero toda cuesta termina y con ella una bajada en la que soltar y volver a enlazar con nuevas sendas. 
A trote cochinero una hora, con paradas, una hora y cuarto y a buen ritmo cuarenta y cinco minutos y es que en esto, como en todo, depende de muchas cosas.

HACEMOS PARADA EN SEGÓBRIGA, CIUDAD ROMANA MANCHEGA POR EXCELENCIA

Hace falta imaginación y mucha ilusión para andar y ganas de poder descubrir y recordar lo que sabemos de los romanos. Tambien podemos inventarnos las cosas pues desde el primer momento de nuestra visita observamos bustos incompletos, cabezas familiares y una montaña a lo lejos donde nos dicen que se encuentran teatros, anfiteatros e incluso una ciudad.
Andaremos y desde lo alto debermos completar lo que el tiempo se llevó y observamos que no somos los primeros en llegar, que ya pasaron otros muchos años atrás. Que no por ser las cosas antiguas fueron peor, todo lo contrario.
Gran amabilidad la de las personas que nos reciben y buen precio el de las entradas a un lugar donde podemos pasar todo el tiempo que queramos, pudiendo incluso llevar nuestra mochila y comer si buen tiempo hace donde nos apetezca. Recomendado el disfrutar del documental, bien antes o despues de la visita, siendo mejor antes para comprender mejor lo que nos espera.









COMENZAMOS CON BELMONTE, ESE GRAN CASTILLO CONQUENSE

Ahora si que lo han dejado curioso. A poco más de una hora tenemos un gran lugar que poder visitar y pasar una buena mañana o tarde recorriendo sus dependencias.
Casi todo se puede recorrer y con un artilugio a modo de teléfono que nos ayuda a comprender cada estancia que visitamos.
El precio no está mal para los servicios que nos ofrece, ocho euros adultos y cuatro los niños con descuentos a desempleados y gente del lugar, pero bien vale la pena para mantener el castillo y la gente que allí trabaja puesto que amabilidad no le falta. El cortado de la cafetería insuperable, muy bueno y a buen precio. Los menús a 10 euros con todo incluido.
Las vistas desde lo alto son muy bonitas para un castillo de este tipo situado en los páramos manchegos donde no tenemos como fondo el rio Loira o grandes montañas nevadas.
Los que como de costumbre disfrutan son los niños que cuanto más suben hacia lo alto del castillo, más alucinan, igual que cuando bajan a los sótanos y con miedo observan las celdas que allí se encuentran.
Terminada la vistita nos esperan las ruinas de aquella gran ciudad romana de Segóbriga, ciudad enterrada por descubrir.