Han sido diez años de ilusión y de tantos momentos que unos se han olvidado y otros se confunden pues en ocasiones, los recuerdos bien parecen de otros tiempos, incluso otra vida.
Pocas cosas nos quedan por hacer, pero bien seguro sean muchas más de las que pensamos; caminos, sendas, vivencias y experiencias por recorrer y vivir.
Que han sido muchos grandes dias de bicicleta y eso, eso no se olvida amigos.
Un saludo a todos, conocidos, desconocidos y olvidados, que todo se hizo con buena fe sin más ánimo que dejarme llevar por un espíritu inquieto.
Sirvan mis palabras de saludo y despedida, pues nada que hagamos comienza a terminar en sus albores.