Por lo demás, salen entre semana un par de horas en plan tranquilo y en ocasiones con otros seres humanos, de los que esta tarde, uno de ellos, ha pensado hasta vender su bicicleta de montaña, regalar la equipación y poner en subasta el GPS en Ebay. Pero todo pasa y vuelvo a recobrar la ilusión, el aliento y el resuello y doy gracias a Dios por seguir de una pieza, porque tan sólo me duele el orgullo.
Y es que claro, en esto de la bicicleta, TODO ES RELATIVO, y cuando piensas que eres el REY y pedaleas con seres de OTRA GALAXIA, lo que te puedes encontrar es con la horma de tu zapato y claro, esta tarde han repartido estopa y por lo visto me he quedado toda.
Un saludo a los hermanos Cabezuelo y a Fran por una gran tarde de bicicleta.
Si algún día quieres saber hasta donde puedes llegar con tus fuerzas, técnica y bicicleta, descarga esta ruta y síguela hasta donde puedas llegar. Te podría decir que la he podido realizar sin bajarme de la bicicleta, pero te mentiría, lo que te puedo decir es que los tres que llevaba delante, se han bajado puntualmente en tan sólo dos sitios sin que hayan tenido que andar como yo, con la bicicleta en la mano. Esos sitios son las primeras sendas en Chinchilla.
Si digo que es muy difícil, lo digo para aquellos que quieran aventurarse e intentar hacer todas las sendas que hemos recorrido, pues su integridad física puede tener ciertos riesgos y para esas cosas dejo esta denominación para avisar. pues el que avisa no es traidor.
La ruta es sencilla en su inicio, de tal manera que salimos de Albacete por pistas de tierra que luego serán asfaltadas hasta Chinchilla, cosa rápida y asequible.
La broma comienza en Chinchilla, con un primer combinado de sendas, unas nuevas y otras al revés, que nos harán forzar al máximo y tal y como he dicho anteriormente, yo he visto como las pueden hacer los que delante llevaba, así es que los fuertes y valientes que no se amilanen que tienen tajo por delante.
Luego se suaviza la cosa y hacemos las sendas de siempre por lugares acostumbrados haciendo lo de siempre hasta llegar al Bosque de las Banderas, Palabras o como le quieran llamar.
La tercera parte será subir y bajar por montañas para buscar trialeras de piedra suelta donde poder exprimir nuestras pocas fuerzas y técnica para terminar rematando con Matamulas.
Finalmente reponemos agua en el pueblo y bajamos por la senda junto a los puentes y buscamos las Culebras para llegar a Albacete por el camino de la Base Aérea.
Así es que, es que se quiera atrever, aquí tiene un nuevo reto en Chinchilla, quien no quiera arriesgar, que siga como esté que tampoco le pasará nada, pero claro, los que somos como somos... volveremos a intentarlo.