Si comienzas la mañana con un buen café en los Murcias de
Valdeganga, con los de siempre y con
cazadores y una buena caja de mantecados de Belmonte, dime tú lo que puede
fallar. Pues todos nos tomamos los cafés con leche, los chupitos y los
mantecados en buena compañía y con buena charleta.
Si además, luego te los vas encontrando cazando, a estos y a
otros que no conoces y nos saludamos con bromas incluidas, pues dime tú lo que
es lo que puede fallar. Y es que aquí en 50km sabemos respetar y respetamos a
quien corresponda y eso tiene su recompensa con diez años de rutas y ni un solo
problema con los buenos cazadores pues siempre hemos pensado que todos podemos
compartir nuestras aficiones como buena gente y si alguna diferencia podemos
tener, pues hablamos y se habla con respeto y de ello, todo el que me conoce
sabe de nuestras maneras.
Y claro, eso lo digo con la experiencia de muchas cosas
vividas y ocurridas y además con unos compañeros de ruta que son auténticos señores, buena
gente, de humilde y buena cuna. Lástima que los haya conocido como quien dice a última hora, cuando estoy más lejos que
cerca de mi tierra. Y claro, eso pasa
despues de diez años dando pedales por acá y por allá, pero la vida y la
bicicleta es en ocasiones, dulcemente curiosa.
Por un lado, tienes al amigo Fran, amigo de toda la vida que
conozco ya de hace más o menos tres años. Compañero de fatigas, buenos ratos y
momentos para el recuerdo, compadre de
esos con los que puedes estar a las duras y a las maduras.
Por otro, al amigo Ignacio, quijote pintoresco y amigo de
sus amigos. Un ser singular que todos estos años ha hecho su camino con su
particular banda de incondicionales. A ver si para el próximo año toca alguna
nocturna.
Finalmente, el novato con experiencia, Carlos,
incombustible, pues a pesar de quejarse de la grasa que le entorpece en la bicicleta,
parece que más que grasa es combustible adiposo pues el pájaro lo tienes
subiendo y bajando, en todo momento pues fuerzas y constancia no le faltan al
amigo.
Del que suscribe poco más que decir; persona que ya comienza
a olvidar mucho de lo vivido pero junto a esta terna de locos de la bicicleta,
bien guarda en su recuerdo de tantas y tantas rutas al amigo Jesús, Ronal, Ramón, Nacho, Ignacio, el primillo, a su cuñado Sergio, a
sus vecinos y a todos aquellos que habeis sido multitud y con los que con los
que tantos y tan buenos momentos hemos pasado en Albacete y sus alrededores.
Sin lugar a dudas hoy ha sido otro gran día de bicicleta
junto a grandes amigos, cazadores, pescadores y otras gentes de los domingos ociosos.
Un saludo a todos los que disfrutamos del campo.