domingo, 7 de abril de 2019

50KM ALICANTE EXTREME 2019

Erase sin borrar una mañana de frio invierno siendo primavera. Bicicletas con biciclistas llegan poco a poco hasta la docena más dos. Madrugada y madrugon, café, cafeses, churros llamados porras en Albacete y chocolate (en Azorin nunca mais).
Y tras erase, fuera o fuese que fue, y seria una ruta épica, suprema, única, inigualable e insuperable.
Conocidos, desconocidos y reconocidos comenzamos una ruta que nos llevaría hasta el borde del mar, hasta la zona cero en Alicante.
Con pedaladas firmes y redondeadas marchamos a las faldas de Chinchilla de Montearagon y llegarías hasta el descanso con avería de postre a Yecla. Gracias a Pepe, ciclista Jumillano y a Ciclos Yecla por su disposición a echarnos una mano en la reparación que finalmente hecha y satisfactoria nos llevaría a nuestro destino.
Adelanto acontecimientos puesto que de la mano de Roberto nos dejamos llevar todos para tan increíble empresa, pues si llegar un ciclista por caminos tras 170 kilómetros a Levante, mucho mayor mérito que roza el milagro lo sería catorce personas de otras tantas.
Y es que bajo ropas ajustadas y coloridas cuales aprendices de Delgados y de induraines, de distintos orígenes, procedencias y destinos, confluimos personas de distinto e incluso desigual carácter. Es por ello que el grupo nos hace fuertes y negarnos a nosotros mismos en aras a un fin común nos ayuda a llegar a nuestro destino, ley de vida pues.
Y tanto kilómetro daría para hablar de la bicicleta, de nosotros y nuestras familias, de política y políticos, de lo divino y lo humano y además en un ambiente envidiable y necesario en su imitación como ejemplo de concordia.
Llegamos a la capital alicantina a yantar a deshora de la mano de Toni, experto en servir y trabajar a menú cerrado por Roberto. Todo al detalle, comida, bebida y bicicletas guardadas en el almacen.
Comidos y bebidos como señores que es lo que somos, buscamos la fotografía junto al mar pues los de llano y secano abrimos los ojos cuando el azul cambiamos por el marrón.
Seria finalmente nuestro señor conductor, mago, animador y seguramente algo más de la empresa Sangiao quien subiría a su autobús a personas, bicicletas, mochilas y cansancios variados.
Mientras escribo estas palabras y he dejado las anteriores ya plasmadas, la noche ha caído rumbo a casa y 14 habichuelos en un autobús de 55 viajeros volvemos anchos y espaciosos a casa con todo lo que significa.
Cuento un poco del todo pues el día se ha llenado de cosas y cosicas que todos y cada uno recordaremos pues dime tu que hasta quien ha hecho la foto de conjunto en el mar, ha sido un nativo exiliado de la Solana... si es que hasta unos paisanos de Cuenca se han unido para la foto de familia.
Termino mi crónica con mucho más que decir a la espera de la siguiente ocasión que no se ni cuando ni donde será pero a bien seguro será como hoy, OTRO GRAN DÍA DE BICICLETA SIN LUGAR A DUDAS.
























ALICANTE EXTREME 2019

domingo, 31 de marzo de 2019

15 AÑOS DE 50KM. UN PROYECTO, UNA IDEA, UNA ILUSIÓN

Estamos de cumpleaños, 15 años de rutas, de ilusión, de proyectos, de buenos y mejores momentos, de rutas inolvidables, de amigos y de tantas experiencias que resultan difícicles de recordar. Parece que fue ayer... ¿o fue ayer?




















ISAIAS NAVARRO, HOY TE HAN MENCIONADO Y TE HE RECORDADO

Acudo a una cafetería y pido el café con leche y la tostada. Le pondré aceite y azucar, algo no muy corriente pues la gente le suele poner sal o tomate, aceite y sal. Qué le vamos a hacer si no concibo ponerle sal a la tostada salvo que sea con tomate.
A lo que iba, resulta que en la esquina de la barra y con publico, teníamos al ilustrado, al doctor, al licenciado de turno, al mediocre supino con un periódico entre las manos. A primera vista y según palabras previas vertidas a propios y extraños (siendo yo de estos últimos), ostentaba el fundamental papel de lector y comentarista del periódico.
Me vais a disculpar pero he sido educado con estereotipos y prejuicios y resulta que siempre que veo alguien con un periódico, con un libro o con cualquier soporte de información similar, pienso que es una persona que tiene o busca formación y eso siempre lo valoro en un primer momento (imagina lo que pienso del que reparte periódicos a la boca de un metro, todos mis respetos).
El caso es que este señor mayor, pues es un señor y además es mayor, comenta algo de un tal Isaias y mi percepción pasa a modo atención, centrando mi percepción auditiva a sus posteriores disertaciones de taberna. Era una esquela como podía atisbar desde mi taburete, de un tal Isaias Navarro que en una ciudad como esta de Albacete no podía ser otro que mi fallecido tío hace días con noventa y pocos años.
Isaias era un hombre grande de pequeño tamaño, con tanta decisión que tenía para repartir, con las ideas claras. Sabía hablar y lo más importante, sabía escuchar. Cuando le decías algo prestaba atención y analizaba lo que le decías de manera que sabías que además de escuchar, hacía de la conversación algo ameno y entretenido.
Trabajador incansable, agronomo, especialista en buscar, localizar y conseguir agua, persona que todo lo llevaba anotado con perfecta caligrafía y perfeccionista en todo.
Natural de un pueblo de la sierra de Albacete, de Alcaraz, un pueblo atípico en un llano de la montaña, en una planicie donde el viento corre a sus anchas y las casas se agrupan para calentarse entre ellas, donde otros como él llegaron muy lejos dejando el pueblo en la juventud especializándose en psicología, religión y otras nobles y no tan nobles artes como la política.
Un hombre hecho a si mismo que podía haber tenido otra trayectoria y destino totalmente distinto y que eligió el camino del trabajo y del esfuerzo que siguió a lo largo de toda su vida.
Se marchó con tranquilidad, enseñándonos al resto como hacerlo llegado el momento, pues la enfermedad y la muerte son experiencias únicas que tan solo se pueden compartir con los más allegados.
Como antes decía, este señor mayor de la cafetería dice que el de la esquela, el tal Isaias era Caballero Agrario, que menudo título era ese, que hay que ver lo que algunos hacen para ser algo, para presumir, que seguramente tenía algún despacho y vete tu a saber.
En mi caso callado mientras comía ante tanta necedad, pero llegado un momento no pude resistirlo más y le dije a este individuo "perdone pero ese Caballero del que usted esta hablando es mi tío que falleció hace unos días y es cierto que era un Caballero, además, su trabajo era el campo, terreno en el que estaba especializado y hombre trabajador e incansable. Decirle que despacho no le recuerdo pero no le hacía falta porque era muy inquieto y seguramente era el último lugar donde encontrarlo".
Continue con mi desayuno, al cabo de unos segundos el comentarista con otros comentarios, sus plantas de la terraza y algo de Torrevieja y al finalizar me despedí del camamero así como el lo hizo conmigo.
Isaias, hoy te han mencionado y te he recordado.


DULCE VENGANZA CHURRERA, JUSTICIA, JUSTICIA.

Desagravios son realizados tras sufrir en mis cuarentonas carnes el desprecio y la indiferencia de una churrera con churrería. Tras pedir y pagar con antelación a quien me debía servir, pude ver como lo hacía con otros tres clientes que accedieron con posterioridad a mi entrada y abono. Como si de un trámite administrativo de la vilipendiada y rancia administración se tratase, le solicité mi dinero y como si nada hubiese sucedido me devolvió el dinero marchándome de allí; hambriento y mucho más tras ver que podía haber satisfecho el instinto primario.
Nada ocurre y como quiera que soy hombre con recursos pude engañar a mi estómago con una ración de cafeína y de azucar concentrada en chupitejo de anis.
Pero el daño estaba hecho, nada podía reparlo y la herida estaba abierta. Con el tiempo casi todo se cura y tiempo hacía falta. Gracias a Dios al día siguente llovería, y el día siguiente es hoy que hoy es siempre todavía. Madrugador y fiel a los impulsos más que al horario, marché a donde siempre tuve que acudir, esa churrería que también está en plena circunvalación pero en la zona del barrio del Pilar. Antiguamente taller de bicicletas regentado por Benjamín que a finales de los ochenta me arreglaba mi bicicleta de montaña con la que recorrería media España.
Un matrimonio con su hija que hacen churros y chocolate y lo sirven con amabilidad y atención. Los churros y el chocolate posiblemente sean los mejores de Albacete, estando y superando a los de antiguas y actuales churrerías. Es pequeño el establecimiento y allí se tiene que esperar, no tanto como la especie de churrería del día de ayer junto al Daniel con nombre de escritor alicantino (por el primer dato casi todos lo pueden saber, por el segundo churrera a tus churros).
A lo que iba, que me he sentado a degustar un buen chocolate caliente con sus churros en una mañana lluviosa mientras los clientes iban y venían con tranquilidad, en silencio, como es debido puesto que en el día de ayer, los apretones, el ruido, las mesas sucias y todo hacía que más que desayunar por gusto lo era por necesidad, tipo rancho o línea de lo que tengo sobrada experiencia.
Así es que, buen desayuno y al tiempo dulce venganza churrera.


sábado, 30 de marzo de 2019

ALICANTE XTREM. ALBACETE TRASVASE, LA GINETA. LA MARMOTA, VIA VERDE

Comenzaba la última mañana previa al cambio de horario y por ello, al día siguiente de noche a la misma hora. Nunca entenderé estas cosas que como otras tantas, siguen por inercia y falta de decisión.
La cosa no pintaba bien puesto que en la churrería Azorín la cosa va de éxito y como bien es sabido, el fracaso comienza con ser bollante. Chocolate con churros pagado con antelación y tras ver como tres posteriores clientes eran servidos por la camarera, solicitud de devolución de lo abonado y despedida por unos meses, mi cuerpo que lo vea.
En consolación un buen café en el Daniel que no falla y para compensación un chupitejo de anis con los amigos de la Xtrem que iban llegando poco a poco.
Mañana fría y con ligero viento y con ello inicio de marcha camino de una ruta de noventa y tantos kilómetros de llaneo para soltar piernas.
Segunda contrariedad tras los churros y con mayor problemática, un radio de la rueda trasera le da por soltarse con ese sonido característico. Como quiera que la Cannodale no lo lleva bien eso de perder radios, vuelta a casa y cambio de bicicleta para continuar la ruta con los compañeros que tienen el detalle de esperar.
Y poco a poco avanzamos hasta la Gineta por Aguas Nuevas, Santa Ana, el Trasvase, el río Don Juan, el Acequión y todo ello por esos interminables tramos de nuestra llanura.
Llegados a la Gineta, ese pueblo de la alta montaña, un almuerzo en condiciones en el bar Diego; bocadillos de Doctorado, platos de Catedra y carajillos señoriales, todo ello a precios populares. Cuatro años hacía que no pasaba por allí y como si de ayer se tratase y "como decíamos ayer", volvíamos en ilustre mañana.
Con estómagos repletos de materia por digerir en proceso químico de producción de energía, que es lo que mueve al ser humano y la sangre concentrada en dicha zona, nos dirigíamos a la zona del río, de la Marmota para tomar la vía Verde de Pozo Rubio y así pedalear con tranquilidad y resguardados del aire.
Terminada la vía, enfrentados a la crudeza de la llanura nuevamente y bosquejando la nueva carretera y buscando caminos asomamos a Albacete donde igual que comenzamos terminamos, separándonos poco a poco para finalizar en casa a buena hora y en buena hora.
Tan solo queda esperar unos días, unas lluvias y los acontecimientos para volver a rodar todos y más camino del mar Mediterráneo, del Mare Nostrum en el lugar de referencia para el nivel 0 geográfico, Alicante.
Hoy ha sido otro gran día de bicicleta grancias a Roberto, a su empeño y a todos los que lo hemos secundado.










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jueves, 28 de marzo de 2019

FILOSOFÍA DE LA BICICLETA ELÉCTRICA. MANERAS DE PEDALEAR, MANERAS DE VIVIR.

A continuación os dejo una serie de reflexiones que me he planteado en relación a la utilización de a bicicleta de montaña y las posibles clasificaciones de ello y que son producto de la imaginación y algo de experiencia. No son verdades absolutas ni pretenden serlo, tan solo son una excusa para poder pasar un rato leyéndolas y comentándolas.



QUIERO MÁS, MUCHO MÁS, MÁSSSSSS. En este caso llegarás más cansado a casa que con tu atmosférica. La bicicleta cortará a 25 y tú seguirás dando pedales moviendo los 25 kilos de bicicleta con sus generosas cubiertas. Si es montaña, subirás por donde no se podía y a pesar de toda la ayuda de su motor, te faltarán piernas, echarás mano de la técnica e irás al límite, tu corazón trabajará mucho más que antes. Apurando batería en rutas largas o exprimiéndola en cortas o intensas seguirás mojando el maillot y el culotte.
Ejemplo: si antes ibas al 100%, ahora irás al 100% más el empuje que te entrega el motor. Total.. que si te pones a pensar, estás mucho más jodido que antes.

AHORA LLEGO MÁS LEJOS QUE ANTES. En estos casos, igual que antes tenías días de todo, ahora combinarás estas jornadas con la ayuda que te presta el motor. De este modo, un día sin muchas ganas, pedalearás poco y le darás un poco más al motor o incluso mucho más. Un día normal, pedalearás lo normal más la ayuda adicional y un día de mucha exigencia será el día en el que tu bicicleta eléctrica te sacará del apuro de cuestarrones o rutas con el aire en contra. En estos casos serás quien marque el ritmo.
Ejemplo:
Día normal. 60% de fuerza más el porcentaje que quieras de motor.
Día perruno. Del 20 al 60% de fuerza más un porcentaje abusivo de motor.
Día especial eléctrica. Del 60% en delante de fuerza más lo que sea preciso de motor.

LA QUIERO PARA ALMORZAR. En solitario o en bandadas, a lomos de sus monturas eléctricas se dirigen raudos camino del merendero en búsqueda de pitanza y bebercio. No bastante con ello, mientras dan cuenta de comida y bebida hasta los límites de la elasticidad del maillot cargan sus bicicletas para luego volver nuevamente como almas que lleva el diablo. Encomiables en su esfuerzo no hacen más que acumular kilos desde que compraron su bicicleta, pero son felices que eso es lo que cuenta.

TENGO POCO TIEMPO Y QUIERO LLEGAR UN POCO MÁS LEJOS. Cansados del trabajo y con poco tiempo libre quieren ir un poco más lejos, hacer un poco más con igualdad de esfuerzo y en su caso los horizontes se amplían y por ende su felicidad.

NO TENGO SUFICIENTE, QUIERO MÁS. Les falta días para salir en bicicleta e incluso alguno de ellos salen el mismo día por la mañana, por la tarde o por la noche. Así que llegan, enchufan la bicicleta para una nueva ruta, todo es poco. Están “enganchados”.

AHÍ LA TENGO, NO TENGO TIEMPO, SALGO CUANDO PUEDO. Hicieron grandes esfuerzos y sacrificios pero siguen liados en su trabajo, en su vida cotidiana, la bicicleta la han conseguido pero no tienen tiempo. Bajo mi punto de vista, su actitud es encomiable pero la vida se les echa encima y no les permite hacer lo que les gustaría. Mis respetos a todos vosotros pues bajo mi punto de vista sois los más grandes.

ESTO ES UNA CASTAÑA, MENUDA CAGADA. Aquí tenemos a los que pensaban que no pedalearían, a los que no cambian más que de asistencia antes que de desarrollo, los que se compran una bicicleta de descenso para ir por un carril bici, los que han vuelto equivocarse por recomendación de su cuñado, de un amigo ilustrado, o porque una revista lo decía.

NO SABE, NO CONTESTA, ES FELIZ Y PUNTO. Aquellos que hacen las cosas porque les apetece y pueden y en ello consiste su pequeño placer, en disfrutar del momento sin razones, sin explicaciones, les da igual donde ir, que hacer y que tomar, el caso es poder salir un ratejo y disfrutar.