En esta ocasión se prueba la grabación con la cámara anclada a la tija en su parte trasera. Las molestias en el pedaleo son inapreciables y el campo de visionado, que parecía reducido, sigue siendo bastante aceptable. Se contrasta, tal y como se pudo apreciar en su momento con la "Shitcam" que por mucho bote que se tenga, el balanceo y vibraciones son inapreciables.
1 comentario:
tambien mola
Publicar un comentario