En Ciudad Real, y en su Campus nos hemos reunido profesores, alumnos, nuevos doctores y familias para celebrar muchas cosas.
Con un coro que amenizaba el acto, responsables de la Universidad nos hablaban y recordaban que nuestra Universidad debe seguir siendo un lugar donde poder aprender, estudiar, investigar e incluso descubrir. Pero para eso, han hecho un llamamiento a quienes tienen la responsabilidad de su mantenimiento y excelencia, el Gobierno regional que debe aumentar el gasto para seguir siendo competitivos.
En el caso de un centenar de nuevos doctores entre los que el que suscribe se incluye, nos hemos presentado ante la Comunidad que nos ha nombrado uno a uno como un reconocimiento público a una decena de decenas de estudios que a lo largo de años y años hemos llevado en nuestras cabezas, escrito y reescrito mientras nuestros seres queridos guardaban nuestra ausencia.
Hoy ha sido un gran día como antes decía donde poder sentirnos arropados entre los de nuestra especialidad junto a otras tantas y todos en un ordenado conglomerado de colores y sensaciones. Estábamos juntos, unidos, tras haber caminado junto a nuestros directores por nuestros interminables desiertos infinitos en formas de tesis.
Directores, amigos, conocidos, nuevos compañeros, forjadores y formadores de nuestras inquietudes allí estaban, más otros tantos a los que no dejábamos de recordar.
Sirvan mis palabras para dar GRACIAS a todos de parte de una persona que sueña con poder estudiar, aprender y disfrutar.
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