domingo, 21 de octubre de 2018

50KM. PEÑAS DE SAN PEDRO EN BUENA COMPAÑÍA, DEDICADA FRAN DE LAS PEÑAS

Hay días de bicicleta que no acostumbro y desconociendo el motivo, las cosas que van sucediendo los hacen grandes, posiblemente sea por las personas más que por la ruta (en si).
Y es por ese motivo que madrugas antes de que Cristo desplace la piedra del Santo Sepulcro y a bordo del coche de Nacho el Grande te vas a las Peñas de San Pedro donde has quedado con Francisco Jones. Lo primero que haces tras saludar es ir al bar de la plaza. Todavía es de noche, es madrugada, pero en el bar ya están los clientes ocupando sus plazas en la barra y mira que tiene metros, no hay lugar para el último en llegar.
Nosotros nos sentamos en una mesa y con el café con leche y la magdalena vemos que en la "gran pantalla" que es la televisión en este caso, Márquez y Dovicioso se juegan la carrera y el primero el mundial. Dovicioso cae cuando iría a adelantar Márquez y este último gana otro mundial más. El amigo Fran se plantea el motivo de tanto madrugón para ver las carreras de motos.
Pero bueno, todo sigue su curso y de Albacete y ese gran pueblo con tanta historia como el Salobral llega el famoso Primillo y su banda repleta de banqueros, economistas, trabajadores de nobles maderas y otras especies.
Juntos y esperando que llegue la luz y en penumbra nos encaminamos al Sahuco tras la estela de un frente lluvioso. Llegados a la cortina de agua y antes de mojarnos vamos a Cuatro Caminos donde nuestra suerte da lugar a no encontrar ese típico barro pegajoso.
Seguimos haciendo kilómetros y tras pasar por la aldea de Santa Ana de la Sierra y Casasola llegaremos al Segoviano, sea Fonda donde el yantar es delicia.
Primeros ciclistas en hacer presencia, patatas, huevos y carnes variadas a elegir, vino, casera, cerveza, agua y coca cola para los niños, café, carajillo quemado y sin rollos fritos volvemos a la carga. Será entonces cuando el amigo Fran desiste tras sufrimiento y esfuerzo y recorta para llegar a su casa y descansar, ójala se cure pronto.
Seguimos para subir a la Atalaya de Lietor y bajar por su senda a Casablanca, los perros sueltos de la aldea y el Mullidar. Recortamos camino y buscando el empuje del viento pasaremos por la Nava de Arriba y por pistas con piedra y luego en buen estado terminaremos en las Peñas de San Pedro. El Primillo dice que quiere más kilómetros y terminará a su aire camino del Salobral.
La presente crónica extensa como anteriores tiempos animado por todos aquellos que todavía dedicáis tiempo a la lectura que vaya más allá de las cuatro líneas de un mensaje de texto, un wasa o un tuit. Dedicado a los que buscáis más que las palabras, los que podéis sentir lo que mi intención busca. Dedicado a todos los que compartimos ilusiones, gustos y aficiones.
Y como bien sabemos, tras el inicio o introducción, el desarrollo con todo el contenido fundamental y anécdotas, llega el final, cuando todo termina, por hoy, esto es todo amigos.
Hoy, sin lugar a dudas, ha sido OTRO GRAN DÍA DE BICICLETA.







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