Chinchilla es el consuelo de los que somos de Albacete cuando queremos hacer sendas y no podemos ir más lejos de lo que nos permiten las circunstancias.
En esta ocasión, como quiera que tenía menos de tres horas y ganas de hacer sendas hasta rozar ciertos límites, he pasado por lugares ya tradicionales como el escalón y el cortafuegos o las zetas. A ello se añade la senda de subida al Bosque de las Palabras para tomar un poco más de técnica, las sendas bajo el castillo y la de Benidorm como le digo yo a la enarenada y la subida del Mortirolo.
Se buscan un par de sendas nuevas a lo lejos del pueblo y se tiene que echar a lo largo de la ruta el pie en tierra media docena de veces más un pateo de cinco minutos en subida por lo imposible de la pendiente.
El resultado es terminar sudando a casi cero grados y viento intenso con sensación de frío polar del que mi cuerpo "pasa" por la dureza de la ruta tomada con alegría en el pedaleo, lo que no permite descanso alguno y la hace más amena.
1 comentario:
MAGNIFICA RUTA , EN TRAMO DE SENDA QUE SE VE EN LA FOTO QUE AY UNA ESCALERA Y UNA FURGONETA ,TUVE UN PERCANCE , DE POCAS SALGO VOLANDO POR LAS ESCALERAS MENOS MAL QUE FRENE A TIEMPO
Publicar un comentario