Luego, como si de un almuerzo se tratase, "cenamos" con risas y cachondeo y tras ello, vimos hacerse de noche en las callejuelas y escalones de Chinchilla. Volvimos como señores y grandes amigos.
Agradecer a Paco lo grande y buena persona que es, pues nadie como el para conocer, congregar y reunir a personas de muy distinta clase y procedencia y aguantarnos de vez en cuando.
En fin... Otra gran noche de bicicleta.
El otro día, tomando el tren en Valencia con las bicicletas en dirección Albacete, una chica que hacía tarjetas de Citibank nos decía "Si no teníamos lugares para ir por Albacete" y nos quedamos un poco parados. Claro que tenemos lugares, pero gracias a Dios los hemos visto y queremos ver más, pues todavía podemos ir un poco más lejos y mientras se pueda, se hará. En esta ocasión, lo que hacemos es "redescubrir" por enésima vez la cuna de la bicicleta de montaña en Albacete. Para ello, lo que haremos será hacer caminos en la ida y vuelta y una vez que estamos en Chinchilla, hacer sendas hasta que cae la noche y cuando falta sol, tomarnos el bocadillo como si de un almuerzo se tratase. Con la digestión en marcha hacemos un breve e intenso periplo por el pueblo y sus escalones donde apretamos un poco más las tuercas y hacemos al revés un tramo de escaleras al que le tenía ganas y "voila", se puede hacer, con la justa presión en los neumáticos y el desarrollo adecuado. La vuelta como de costumbre, a buen ritmo y comentando las mejores jugadas.
2 comentarios:
Increible el surtido de sendas chinchillanas, me lo pasé genial, !!! Te voy a matar !!!!
Y tú que estuviste a la altura pájaro, grata sorpresa me diste pues estuvise a la altura toda la ruta. A ver si la cosa tira para adelante que llevas muy buen camino.
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