...Y todo eso mientras suena la música de Joe Dolan con su "mujer loca", que nadie nos tenga pena pues la vida nos dejó vivir mientras el mundo se derrumbaba a nuestro paso.
Mientras bajabamos sendas, a lo lejos podíamos ver lo que nos esperaba y por ello vivíamos y disfrutabamos y nos caimos sabiendo que seguiriamos adelante incluso con los huesos rotos, pues fuerza y tesón nos quedaba por doquier.
Recuerda, como dice el dicho, "no dejarle a mi mujer vender la bicicleta por lo que le dije que me costó" y que si algún día de mi boca salió algo que faltase a la verdad o realidad, el motivo fue por no preocuparla pues siempre la quise tranquila por ella y por los nuestros.
Pues aquí está lo que será el recorrido con Rutadura y aunque falten los tramos cuesta arriba, bien sabemos que tambien se disfruta, se sufre y se rie uno bastante.
No hay comentarios:
Publicar un comentario