Termina el día de mi santo y el de mi hijo y cuando me siento en el sofá del salón tras haber pasado casi todo el día y haber hecho lo que acostumbro a hacer todos los miercoles, descubro un dibujo en la mesita.
Me acerco y observo un dibujo que Lucia ha hecho de una fotografía que significa mucho para mi.
La fotografía no recuerdo el día exacto, pero cada vez que la veo pienso en todo lo que por mi cabeza pasaba mientras tenía a Lucia, tan pequeña, entre mis brazos.
Lucía tiene 9 años y pico más que aquel día y ahora es ella la que hace un dibujo de una fotografía de cuando yo la tenía entre mis brazos. Lucia ha sido capaz de dibujar y además recoger en su dibujo todo lo que yo sentía, incluso lo que ella piensa que pensaba mientras los dos nos mirábamos quedando preparados a esperar el futuro que hoy nos ha vuelto a reencontrar.
Lucia tiene algo especial y ella lo sabe y eso puede ser muchas cosas además del mejor regalo que hoy he recibido en mi santo de todos los que me quieren y mira que regalando no se han quedado cortos.
3 comentarios:
tienes una artista en casa.los pequeños detalles son los mejores
Qué bonito!!!
Si señor¡¡¡
Ese padrazo orgulloso¡¡ Las alegrías que nos dan los hijos son las mejores.
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