Alejándome de la realidad virtual quedo en la nube subido a mi islote en forma de blog. Aquí estoy en un océano cada vez más pequeño donde espero la visita inesperada de algún amigo, conocido o desconocido. Dejo mis historias en el cuaderno de bitácora para el presente, futuro y pasado sin saber de quien se asoma a mi rincón, bienvenido seas, seas quien seas.
Alejado de amigos virtuales y relaciones impersonales. Abocado a compartir ratos en este pequeño lugar mientras sigo viviendo sin ataduras lo que para otros son útiles herramientas. ¿Qué será de mi?
2 comentarios:
No es por nada pero yo ni tengo ni he tenido nada de eso y no me ha pasado nada
Pues considerate un hombre afortunado.
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