Pero en esta ocasión, la cosa trataba de reunir las mejores sendas conocidas y las desconocidas y llegar a los cien kilómetros. Cierto es que nos han quedado unas cuantas sin hacer pero somos seres humanos y tenemos limitaciones y esta ruta es especial para buscar tus limitaciones.
Y es que haremos sendas largas, interminables y otras cortas e intensas, tambien tendremos algunas donde descabalgaremos momentáneamente y alguna en la que deberemos patear unos minutos. Tambien nos enfrentaremos a obstaculos por doquier; piedras, escalones, regueros, tierra suelta, paredes infranqueables y cuestas abajo pronunciadas y con curva.
También tendremos que llevar agua pues tenemos en Consolación, Villalpardo y Los Cárceles (pero es del río con el consiguiente riesgo) y luego, muchos kilómetros despues en Tabaqueros. Por ello mejor hacer la ruta en días de poco calor pues debemos llevar agua en abundancia y tenerla para todo el recorrido.
Que no te engañe el desnivel pues son más de 1.900 metros y no lo que indica wikiloc y eso, en 100 kilómetros cargadisimos de sendas es algo reservado para piernas preparadas y sobradas de técnica.
El río no lo veremos hasta la segunda mitad del recorrido y el disfrute será pleno, aunque no podemos despistarnos mucho que nuestros huesos buscarán piedra.
Los paisajes son curiosos y el río nos deja un buen recuerdo con sus cristalinas aguas, campos de vides y pinos por doquier.
El ritmo ha sido bueno, por lo que con tranquilidad le sumaremos al tiempo total un par de horas extra.
Recomendada a los que como es nuestro caso, sufren y disfrutan al mismo tiempo con la bicicleta.
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