Pudimos ver en Vizcainos las estatuas que un escultor realiza en las rocas que por el camino se encuentran, con motivos religiosos incluso llega a realizar una imagen del Sagrado Corazón en la montaña a modo de retablo.
Posteriormente paseamos por Bogarra y sus callejones para llegar a disfrutar de su Iglesia y las vistas que ofrece su patio.
Después comimos a la sombra de una noguera junto a una fuente de agua fresca en la subida de las Yeguarizas y para terminar, fuimos a ver unas cuevas y a disfrutar de las cascadas del Batán donde no pisaba hacía un par de décadas. El encanto del agua y la naturaleza sigue presente en este rincón de la sierra donde podemos volver a disfrutar de lo mejor de nosotros y nuestra sierra.
5 comentarios:
Ya decía yo que no veía la bici, esta fué una ruta a pié
La piscina natural de la foto posterior a la de la noguera: ahí dentro se me cayó un machete... tenía doce o trece años ¿no? tú lo sacaste de ahí creo recordar.. je je je.
Un saludo Alex !!
Saludos Pepe, si buenos fueron los momentos que pasamos en su día, mejores son cuando volvemos al Batán y recordamos lo vivido.
Un saludo y me alegro de saber de ti.
Fantastic photographs, fine views. I am greeting
Thanks you, ZielonaMila.
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