Tras haber descansado DOS DÍAS, después de la última ruta de la temporada pasada y con las piernas como dos mazas todavía con efecto memoria de mover desarrollo, una nueva tarde con el amigo Fran, como no, para volver a machacar las pocas fibras musculares que nos quedan en pié.
Para ello, salida a las 18,30 de la tarde con un sol infernal, aire abrasador y calina en el horizonte, agua ardiente y ganas de pedalear.... ¿Alguno de ustedes nos entiende?.
Pues tras apartar durante veinte kilómetros piedras y polvo del camino nos adentramos en los pinares de Pozo Rubio para sendear un poco y parar en LA FUENTE DE LA TEJA de la que siempre me habló mi padre, siempre eterna y con su agonizante chorro de agua, en esta ocasión arreglada, igual que la vereda de Pozo Rubio y los zarzales de la Fuente.
Después, discurrir por el río con el frescor de la sombra de los árboles y llovizna de aspersores para terminar camino de Albacete por las Cumbres del Torcio tras pasar por el Club de Golf y llaneo que terminaría con el atardecer, la caída del sol, la salida de la luna y el anochecer.
Piernas doloridas, brutal cansancio, boca abrasadora a estas horas de la madrugada y el gusto de haber pasado otra gran tarde de bicicleta.... No se donde llegaremos, pero mientras tanto, disfrutaremos del camino.
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